La oscuridad, aún desprovista de masa,
siempre está en marcha;
solitaria,
pobre,
sórdida,
bestial
y breve en la interferencia.
Luego está la indiferencia en el vacío,
construido donde la masa no tiene fin y deslumbra,
donde nace la ceguera que anestesia la realidad,
donde el resultado de la frecuencia depende del desfase
y de grandes dosis de lenguaje paliativo.
Pascual Herrera
Dosis de lenguaje paliativo!
ResponderEliminarSublime.